?No es fascinante?
Thursday, August 2, 2007
LA pobreza es, para algunos agudos analistas socioecon?micos, la riqueza del futuro y empieza a transformarse de problema en oportunidad.
Ha empezado a surgir un creciente inter?s alrededor de un tema trascendente para la humanidad: la posibilidad de crear masivamente modelos de negocios rentables que permiten a la vez, generar utilidades y lograr la superaci?n de las comunidades m?s pobres.
Lo que es m?s, crear oportunidades de negocio con y para la poblaci?n m?s pobre no s?lo se ve como una posibilidad, sino como una necesidad de la econom?a del pr?ximo futuro.
?Qu? significa esto? Que la mayor carga de las personas de escasos recursos empezar? a desaparecer. Y esa es la carga de ser ignorados, de no existir en la mente, las preocupaciones y las ocupaciones del resto de la sociedad. Si acaso, s?lo est?n presentes en el coraz?n y las acciones de algunos grupos con una conciencia social m?s desarrollada.
Que los pobres empiecen a ser considerados como un estrato importante para hacer negocios es un cambio sustantivo en la cultura econ?mica de la humanidad que va a provocar un cambio social de enormes dimensiones.
Nadie dejar? de buscar trabajar en ese enorme segmento de la poblaci?n, porque sea por razones humanitarias o de negocio, est? empezando a ser el target, como dicen los expertos en mercadotecnia, de empresarios y corporaciones, por un lado y de l?deres sociales y ONG, por el otro.
El mi?rcoles pasado, en la reuni?n “M?xico, Siglo XXI” de Fundaci?n Telmex, dos oradores, Carlos Slim y el ex presidente espa?ol Felipe Gonz?lez, esto es, un empresario y un pol?tico de izquierda, coincidieron en que trabajar en atender las necesidades de los pobres, adem?s de ser un imperativo ?tico, era una oportunidad econ?mica en donde todos saldr?n beneficiados.
Eso no es una ocurrencia, sino una coincidencia de criterio con diversos pensadores que as? lo se?alan. Quiz? el m?s destacado de ellos es C.K. Prahalad, que en su libro La oportunidad de negocios en la base de la pir?mide propone un nuevo paradigma econ?mico para el desarrollo de la sociedad moderna.
Este hombre no es un pensador marginal; seg?n la revista Business Week, “?bien puede ser el pensador m?s influyente de hoy en el tema de la estrategia empresarial”.
El art?culo de Prahalad “El fin del imperialismo corporativo” obtuvo el Premio McKinsey al mejor art?culo en 1998. Su pensamiento, sin duda, ha empezado a generar una nueva din?mica orientada a la superaci?n de la pobreza global por parte de m?ltiples empresas privadas.
Esto sin duda es un pensamiento nuevo, en donde el sector privado empieza a arrebatarle al Estado el monopolio de velar por los pobres. La diferencia es que una vez que una comunidad marginada comienza a desarrollar una base productiva sustentable, a trav?s de proyectos rentables, deja de ser objeto de apoyos y programas sociales y pasa a ser quien define su propio destino. ?Por qu? empieza a verse el trabajo en “la base de la pir?mide” como necesidad econ?mica, adem?s de un imperativo ?tico?
Sencillamente porque el mercado en “la punta de la pir?mide” ya se satur?. Todas las inversiones del mundo han concurrido al lugar m?s estrecho de la pir?mide social: la punta. Por ello, Prahalad pregunta: “?En d?nde se encuentra el mercado m?s interesante, m?s nuevo y de mayor crecimiento? En donde uno menos lo esperar?a? ?En la base de la pir?mide! Colectivamente hablando, los billones de pobres del planeta tienen enormes capacidades empresariales y poder adquisitivo, y las empresas pueden aprender a servirles y a ayudarles a salir de la pobreza”. Esto, a la vez de generar utilidades.
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